Prevenir el maltrato de nuestros adultos mayores es un trabajo en el que todos debemos de participar.
Existen ciertas medidas que los encargados de residencias de retiro y los seres queridos podemos tomar para evitar que los ancianos sufran de un trato negligente y queremos contarle más acerca de ellas hoy. De esta forma, podemos ayudar a minimizar las estadísticas de abuso en los asilos.
¿Cómo puede ayudar el personal de casas de retiro?
- Contratando personal capacitado
- Monitoreando las actividades y comportamiento de los cuidadores
- Solicitando visitas de trabajadores sociales que supervisen el desempeño del asilo en el cuidado de los adultos mayores
- Siguiendo protocolos de logística y administración de tareas para proporcionar la atención que merece cada residente
- Capacitando constantemente a los empleados en estos temas para que conozcan la importancia de sus acciones en la vida de un anciano
- Instalando cámaras de seguridad para supervisar el comportamiento de los cuidadores cuando sus superiores no los están observando personalmente.
¿Cómo puede ayudar un ser querido?
- Haga visitas periódicas a su ser querido
- Ponga atención a su comportamiento y salud física/ mental
- Invite a su ser querido a hablar si siente que está siendo abusado
- Escuche las preocupaciones de su ser querido y no las tome a la ligera
- Solicite comentarios de sus cuidadores o supervisores del asilo
- Infórmese acerca de los signos más comunes de abuso para que pueda identificarlos a tiempo
Juntos, podemos ayudar a implementar estrategias a tiempo para evitar que un cuidador abuse de nuestros seres queridos. Nadie merece pasar sus últimos años sufriendo de maltrato y es nuestra responsabilidad velar por los derechos de quienes queremos y requieren nuestra ayuda.
Si siente que el adulto mayor que visita en un asilo está sufriendo acoso por parte del personal del mismo, reportelo a sus supervisores inmediatamente. En caso de no ser escuchado, o necesitar apoyo legal, no dude en contactar a nuestros abogados.
Estamos preparados para hacer justicia para quienes han sido tratados de forma negligente.