Negligencia en asilos de ancianos

La negligencia en los asilos se ha vuelto un problema nacional debido a las altas cifras que se han registrado durante los últimos años de esta situación que afecta a miles de personas de la tercera edad alrededor del país.

Comencemos por definir que es la negligencia. En este caso, la negligencia en un asilo es la acción o falta de esta para poder satisfacer las necesidades básicas de un adulto mayor que esté viviendo en el asilo. Algunas de estas necesidades pueden ser la alimentación, medicación, higiene, entre otras.

Las acciones negligentes que comete el personal de un asilo pueden ser de manera intencional o accidental. Sin embargo, estas acciones pueden traer consecuencias físicas y emocionales. Debemos recordar que los adultos mayores son más vulnerables y frágiles a cualquier tipo de maltrato.

La negligencia emocional es uno de los tipos de actos negligentes que se presentan en las casas de retiro. Esta puede generar miedo, ansiedad, depresión, y otras emociones negativas en las víctimas. También hay casos de negligencia médica en los que la persona encargada no proporciona los medicamentos necesarios y en el horario establecido. En estos casos, las consecuencias pueden ser muy severas, e incluso fatales. Otro más es la negligencia en sus necesidades básicas y actividades cotidianas. Esto puede incluir dejar de ayudarles a ducharse, olvidar alimentarlos, permitir que soporten temperaturas muy altas o muy bajas para ellos, entre otras.

Desafortunadamente, una de las causas más comunes para que las estadísticas de negligencia y abuso continúen en crecimiento es que los asilos no cuentan suficiente personal capacitado. Esto complica las posibilidades de atender a todos los residentes adecuadamente. Por otra parte, quienes contratan al personal, a veces fallan en evaluar las habilidades de los candidatos y en proveer las capacitaciones necesarias.

En caso de que tenga a un ser querido dentro de un asilo, le recomendamos estar alerta a las señales de posible maltrato o negligencia. Algunas señales comunes son angustia, confusión, falta de higiene, heridas, etc. Si sospechas tu ser querido está siendo víctima de algún tipo de maltrato, no dudes en contactarnos apoyo legal.